6 oct 2014

ENSALADA DE HIGOS

Ensalada de higos
Llevaba tiempo queriendo publicar esta receta desde el día que, quien me lo iba a decir, publiqué esta foto en Instagram de lo que fue la cena de esa noche, no muy buena por cierto (la foto, no la cena) con luz artificial y sobre la mesa de la cocina con mi antiguo Nexus, y empezó a recibir "me gustas" sin parar. La receta era sencilla, sobre una base de láminas de jamón ibérico, higos limpios y cortados en láminas, toquecito de gomasio (mezcla de sal y sésamo), chorrito de aove y parmesano rallado. Lo más simple del mundo y lo más rico también.

Foto de Instagram

Está claro que  tenía repetirla para publicarla y poder hacer una foto en condiciones, pero había que esperar a que fuera temporada de higos y eso es finales de Agosto. Me diréis que en Junio ya hay higos y así es pero no son higos son brevas, que son los primero higos de la temporada. Compré pero me desanimé porque muy buena pinta por fuera pero por dentro sosos, sosísimos, así que decidí olvidarme hasta finales de Septiembre, que me costó encontrarlos pero ha merecido la pena porque son puro néctar.


La combinación del jamón con los higos es espectacular, eso sí el higo tiene que estar bien maduro y el jamón sabroso, no tiene porque ser ibérico pero sí un buen jamón serrano y siempre cortado muy fino.

Mi relación con los higos es breve, hasta hace muy poco tiempo no me gustaban nada y en cambio ahora me encantan, en pequeñas dosis eso sí que son una bomba. Está claro que los gustos y el paladar cambian y maduran con los años, al igual que las personas, por eso hay que probarlo todo antes de decir "no me gusta"; y aunque sí que es cierto que mi paladar a madurado y evolucionado sigue resistiéndose al dulce que me gusta poco, ya que me cansa y me empalaga enseguida.

Esto por supuesto lo digo con conocimiento de causa, ya que lo he intentado en varias ocasiones, pero sigo sin poder comerme ni un pastel, ni unas natillas, ni una crema catalana, ni un arroz con leche, ni un cupcake, ni muchísimo menos una de esas tartas de fondant que tan de moda están ahora, es más cuando algo es demasiado dulce me duelen un montón las encías (algo curioso y que me ha pasado siempre), así que si queréis agasajarme con el dulce no me vais a conquistar; pero tampoco se os ocurra darme sesos que no los puedo ni ver y mira que mi madre hace unos buñuelos estupendos y me los ha intentado camuflar de mil maneras pero no hay forma, acabo comiéndome la masa y quitando el seso. Por lo demás y como diría mi padre "tengo buena boca" vamos que me gusta todo, jajajaja.

Y ahora vamos al lío.

Ingredientes (3 pax):

3 higos maduros - 8 lonchas de jamón ibérico muy finas - canónigos - parmesano - sal - aove

Preparación:

Lavar bien los higos, secarlos con papel de cocina y quitarles el tallo. Seguidamente con un cuchillo afilado lo dividimos en 4 partes pero sin llegar a cortarlos del todo, que queden unidos por la base.

En una fuente ponemos como base los canónigos, colocamos encima cada higo y añadimos sal por los canónigos y los higos. Seguidamente enrollamos el jamón en forma de cono y ponemos dos filetes por higo, dentro de cada higo como se aprecia en la foto. Regamos con aceite de oliva por encima de los canónigos y los higos y teminamos con parmesano rallado en el último momento.

En los huecos entre los higos he colocado unas lascas de parmesano y una loncha de jamón, pero esto es opcional.

Y ya tenemos lista esta rica ensalada, como veis fácil, fácil.

Higos con jamón
Aclaraciones/notas:

No os de miedo añadir sal a los higos, en pequeña cantidad eso sí, sólo un toque que nos potenciará el dulzor y el sabor del higo. Para comprobar esto hay una prueba infalible, cortar un higo en rodajas o en láminas como más os apetezca, añadir una pizca de sal y un chorrito de aceite y probarlo. Bocado exquisito, veréis como la sal potencia el dulzor del higo y lo realza.

Os he puesto dos versiones de esta receta con higos, la publicada en Instagram hace un año y esta que os traigo hoy mas vistosa y con un emplatado más trabajado. Hacer la que más os guste, por supuesto podéis sustituir los canónigos por otro toque verde (rúcula, brotes tiernos, germinados, etc) eso sí no os aconsejo lechuga, como mucho la de hoja de roble, pero sólo la punta de las hojas (la parte morada) sin nada de tallo.

Por supuesto da igual el tipo de higo que sea, este es de la variedad higo negro, español negro o "Genca púrpura" que tiene como característica una pulpa amarillenta haciéndose de color rojizo a rojo hacia el centro, jugoso, con sabor dulce y rico.

Para la versión vegetariana quitar el jamón y proceder igual con el resto, si se es intolerante a la lactosa sustituir el parmesano por cualquier queso curado de oveja, y por supuesto es apto para celíacos.

Espero que os haya gustado y ¡¡¡ A DISFRUTAR !!!

4 comentarios:

  1. Muy ricas tus dos versiones de higos con jamón !!!

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  2. Yo tengo un amor odio a los higos, quizás por que los que se compran normalmente están verdes y odio abrir un higo y que no se pueda comer, por eso acabo no comprándolos, probaré eso de la sal y el aceite y el jamón y el queso, jejeje, vamos que me mola tu receta.
    Besos.

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    1. Como te entiendo José, eso mismo me pasó a principios de verano con unas brevas como cuento en el post y ya se me quitaron las ganas, pero esta receta está tan rica que al final sucumbí. Obviamente, estos higos no son como los que tiene papá en el pueblo pero a falta de otra cosa ..

      Anímate y me cuentas, aunque ahora igual lo tienes más difícil para conseguirlos que están ya en las últimas.

      Gracias y besos,

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